Venezuela. Congresistas de 53 países se reunieron en Caracas para crear una red de parlamentarios antifascistas

Por Lorenzo Santiago, Brasil de Fato /Resumen Latinoamericano, 6 de noviembre de 2024.

Foro Parlamentario Mundial Antifascista reunió en Caracas a congresistas de 53 países del mundo para iniciar encuentro de legisladores de izquierda – Cha Dafol

La articulación tendrá como lineamiento denunciar el bloqueo económico aplicado por países del Norte Global

En los últimos dos meses, Venezuela se ha convertido en escenario de congresos, paneles y grupos de debate para discutir el avance de la extrema derecha en el mundo . Pero si esta articulación fue hecha inicialmente por movimientos populares, el gobierno venezolano comenzó este martes (5) a movilizar a diputados y senadores de diferentes países para formar una red de izquierda en diferentes congresos y parlamentos del mundo.

El Foro Parlamentario Mundial Antifascista reunió en Caracas a congresistas de 53 países de todo el mundo para iniciar una reunión de legisladores de izquierda. El objetivo es iniciar una agenda internacional de izquierda para enfrentar a la extrema derecha y organizar agendas progresistas .

“Esta práctica internacional de los parlamentarios de izquierda tiene la posibilidad de establecer una agenda a nivel global y poder llevar nuestras agendas a nuestros parlamentos. Con esto sincronizamos los temas prioritarios para implementar las reformas necesarias y lograr una mayor justicia social para lograr superar este problema endémico de opresión por parte del capital nacional y extranjero”, dijo a Brasil de Fato el congresista Edman Dubón, de Libertad y Renovación de Honduras .

Los congresistas se reunieron en mesas de trabajo para definir agendas prioritarias, establecer un calendario de debates y fijar lineamientos para los grupos de izquierda en todo el mundo. 

Al final de los dos días de discusión, los parlamentarios reforzaron que, para que esta iniciativa tenga éxito, la coordinación debe basarse en el respeto al multiculturalismo y una postura enfática contra las sanciones aplicadas por algunas economías occidentales contra países que no están en el centro. de los sistemas capitalistas. 

Como principal medida se creó la Red Parlamentaria Antifascista, que será un grupo de trabajo permanente encabezado por congresistas de izquierda.

Para María Agüero, diputada de Perú Libre, la coordinación entre legisladores y diferentes países era un vacío en la izquierda latinoamericana. Según ella, no es sólo un plan de acción, sino el intercambio de conocimientos y diferentes experiencias lo que enriquece la “lucha de los agentes políticos”.

“Es un terreno muy fértil. Porque conocemos internamente nuestros propios territorios, partidos, movimientos y grupos, y luego terminamos centrándonos más en los problemas que en las virtudes. Y esto es diferente a cuando conocemos la movilización de otros países y regiones. Conoces otros pensamientos, otras formaciones políticas, otros espacios de lucha y eso inspira y suma un método para diferentes organizaciones. Te das cuenta de que el problema no es sólo tuyo, es de toda la humanidad”, dijo a Brasil de Hecho .

Desde las elecciones venezolanas del 28 de julio, en las que el presidente Nicolás Maduro ganó un tercer mandato, se han celebrado dos Congresos Antifascistas en el país. El Movimiento fue una respuesta a la oposición venezolana, que no sólo impugnó el resultado de las elecciones, sino que también organizó actos violentos en todo el país. 

Los últimos acontecimientos, sin embargo, han reunido a movimientos y organizaciones populares. Esta vez, la idea era movilizar a los congresistas con el objetivo de cambiar la estructura de poder de los países para mover las políticas locales hacia la izquierda.

“Hay una diferencia entre la unión de movimientos sociales y parlamentarios. Nosotros tenemos la toma de decisiones, mientras que los movimientos sociales tienen la calle, la lucha social, pero terminan no siendo actores inmediatos en la toma de decisiones y, por lo tanto, tenemos la deber de cumplir con esta agenda”, afirmó Dubón. 

Venezuela en primera línea

Maduro está directamente involucrado en esta articulación. No sólo convocó a actos antifascistas, sino que habló en todos ellos. El presidente quiere colocar a Venezuela como un centro de discusión y “liderazgo en la lucha contra la extrema derecha”. El Foro Parlamentario no fue diferente. El presidente habló en la apertura y en la clausura y habló sobre el crecimiento de los movimientos reaccionarios en el mundo y citó el genocidio contra la Franja de Gaza como ejemplo de la expresión del fascismo en el mundo.

“Los historiadores ya han calculado que la única comparación con el genocidio en Gaza es el exterminio promovido por Hitler. Es una de las formas más profundas de violencia. Discutimos por qué, cuándo y dónde resurgieron corrientes xenófobas, extremistas y racistas. Esta anti- encuentro fascista fue un momento oportuno para discutir y ponerle una barrera al fascismo es al sionismo”, afirmó Maduro.

En el foro también estuvo la vicepresidenta Delcy Rodríguez y colocó las sanciones en el centro de las discusiones. Según ella, el fascismo es una expresión extremista para responder a una crisis del sistema capitalista en el mundo y las sanciones son una cara de esta política.

“No podemos hablar de fascismo sin entender que cuando se expande su objetivo es tejer redes internacionales para responder a una crisis del sistema capitalista. Hoy existen 31.277 medidas coercitivas contra los pueblos del mundo, con una política de exterminio de pueblos. El 91% de los países sancionados son productores de energía: Rusia, Irán, Siria, Irak y Venezuela. El objetivo es apoderarse de los productores de energía. 

También habló sobre los gobiernos del Sur Global que se alinean con una agenda imperialista que “busca afectar proyectos que brinden una alternativa al capitalismo”. Sin mencionar a Brasil, Delcy Rodríguez habló sobre el veto al ingreso de Venezuela a los BRICS y dijo que el país es utilizado como un “caballo de Troya” por Estados Unidos contra un “nuevo mundo que se está configurando”.

Edición: Rodrigo Durão Coelho